Route de Narbonne-Plage (Sortie 37, direction Narbonne Plage), 11100 Narbonne
El Château Catherine de Montgolfier ofrece una escapada única en el corazón del macizo de La Clape, en un entorno que combina naturaleza y patrimonio vitivinícola. La finca se extiende sobre 22 hectáreas, de las cuales 15,5 están dedicadas a la viña, rodeadas de pinares y colinas boscosas. Este lugar, propicio para la relajación, acoge a los visitantes en una atmósfera impregnada de serenidad. Las habitaciones de huéspedes, cinco en total, ofrecen cada una un confort personalizado. Tres de ellas, La Rose, La Vague y L’Horizon, están situadas en la planta baja y disponen de acceso directo a la piscina, lo que permite disfrutar plenamente del exterior. Las otras dos, La Perle y L’Escapade, están ubicadas en el edificio principal, ofreciendo así una privacidad perfecta para los visitantes.
Las habitaciones, todas decoradas según una temática inspirada en el sur de Francia, son espaciosas y están equipadas con todo lo necesario para una estancia cómoda. Televisión, microondas, pequeño refrigerador, así como una terraza privada completan el conjunto. La vista sobre los alrededores invita al descanso, y cada habitación disfruta de una atmósfera tranquila, ya sea con o sin vis-a-vis. La finca también ofrece un aparcamiento privado para los huéspedes y una conexión Wi-Fi accesible en todas las áreas.
Más allá de las habitaciones, el Château Catherine de Montgolfier pone a disposición de sus visitantes una hermosa piscina, ideal para relajarse o nadar algunas vueltas durante los meses más calurosos. La finca también cuenta con un circuito de salud, perfecto para aquellos que desean mantenerse activos durante su estancia. Además, se organizan regularmente eventos estivales como espectáculos y exposiciones artísticas, que añaden un toque cultural a la experiencia.
El desayuno, incluido en la estancia, se sirve cada mañana en el gran salón dedicado o en la terraza adyacente, ofreciendo una vista despejada de los jardines de la finca. Los productos locales son los protagonistas, y el servicio busca ofrecer una calidad a la altura del entorno.
Los amantes del vino estarán encantados de poder descubrir los vinos de la finca, que se destacan por su calidad y su potencial como futuros grandes vinos orgánicos del Languedoc. Las catas, organizadas por el propietario, permiten aprender más sobre la historia y las especificidades de la denominación La Clape.
Los huéspedes también pueden explorar la región siguiendo los caminos de senderismo a pie o en bicicleta, que los llevarán a través de los paisajes pintorescos del Parque Natural Regional de la Narbonnaise. Este entorno natural, entre el mar y los viñedos, invita al descubrimiento, ya sea hacia las playas mediterráneas o los pueblos cercanos como Gruissan.
El Château Catherine de Montgolfier no es solo un lugar de descanso; es también un lugar de intercambio, donde la pasión por el arte y la cultura ocupa un lugar importante. La galería de arte presente en el lugar acoge regularmente exposiciones temporales, mientras que las noches musicales de verano aportan una atmósfera acogedora a los días pasados en el castillo.
La finca también dispone de salas de seminarios para empresas o grupos que buscan un entorno de trabajo inspirador y tranquilo. Entre colinas y viñedos, este lugar combina profesionalismo y relajación, ofreciendo al mismo tiempo la posibilidad de renovarse después de las reuniones.
Para los visitantes que deseen explorar la ciudad de Narbona, el centro histórico está a solo unos kilómetros. Su rico patrimonio romano, que incluye la Vía Domitia y la imponente catedral de San Justo y San Pastor, lo convierte en una parada imprescindible. También se puede descubrir el Palacio de los Arzobispos, que alberga varios museos, o pasear por las Halles de Narbonne, un mercado cubierto famoso por sus productos locales.
Las playas del Mediterráneo también están cerca, con Narbonne-Plage, Gruissan y Saint-Pierre-la-Mer, que ofrecen cada una paisajes variados y hermosos paseos junto al mar. Ya sea que busque relajarse al sol o actividades acuáticas, estos balnearios cumplirán con sus expectativas.
Para una experiencia gastronómica, Narbonne está llena de buenas direcciones. El restaurante "Les Grands Buffets" ofrece una amplia selección de platos locales, mientras que "Le Petit Comptoir" es reconocido por sus especialidades elaboradas con productos frescos y regionales. Si desea prolongar su descubrimiento de los vinos locales, la finca de l’Hospitalet, situada cerca, también ofrece catas acompañadas de comidas gastronómicas.
Para los amantes del arte y la cultura, el Museo de Arte e Historia de Narbonne es una visita obligada. Sus colecciones variadas cubren periodos que van desde la Antigüedad hasta el siglo XX, con exposiciones temporales a lo largo del año.
El Château Catherine de Montgolfier es mucho más que una simple casa de huéspedes. Es una invitación al descubrimiento, al descanso y a la convivencia, en un entorno natural y cultural rico, donde cada momento pasado parece ofrecer una nueva perspectiva de la belleza del sur de Francia.
Actividades
General
Servicios
Restauración
Área de piscina y bienestar
Zonas comunes
Varios
Desde 100 EUR por noche